El 2 de febrero, David Cameron y el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, se comprometieron en un proyecto de acuerdo que permitiría al primer ministro británico hacer campaña para mantener el Reino Unido en la Unión Europea en el referéndum que se celebrará a finales de este año.
El plan es la respuesta a las demandas de Camerony consagra entre otros, el freno gradual británico a la prestación de beneficios sociales a trabajadores de la UE y corta las ayudas a los niños de trabajadores de la UE que viven fuera del Reino Unido.El acuerdo también incluye que las referencias de los tratados a "unión cada vez más estrecha" no "son un equivalente al objetivo de la integración política". Propone una "tarjeta roja" que "permitiría que un grupo de Parlamentos nacionales que constituya más del 55 por ciento de los votos en el Consejo vetara la legislación de la UE" afirma The Guardian.
"Asesores del gobierno y embajadores de la UE se reúnen en Bruselas el 5 de febrero para un primer debate sobre las propuestas presentadas por Tusk" informa EUobserver. El acuerdo será sellado en una cumbre de la UE el 18 de febrero.