Estampa histórica de la batalla de Sedán en 1870.

Aquí hay poco que celebrar

En Sedán, desde Bismarck hasta Hitler, los franceses han intentado en vano y en tres ocasiones resistir ante los alemanes. Un periodista que acude a esta localidad para ver en qué estado se encuentra la reconciliación franco-alemana 50 años tras el Tratado del Elíseo descubre una ciudad minada por la pobreza y que vive de los recuerdos del pasado.

Publicado en 22 enero 2013 a las 11:45
Estampa histórica de la batalla de Sedán en 1870.

Los copos de nieve revolotean a la luz de las farolas. La plaza de la estación reluce bajo el manto blanco del invierno. Los escasos pasajeros del tren de alta velocidad que se bajan aquí, en Sedán, se alejan con paso rápido. Un silencio casi solemne envuelve el lugar. Durante varios minutos, aquí no se ve ni un alma, ni coches, ni autobuses, ni taxis.

Lea el artículo completo en el sitio web de Frankfurter Rundschau
[Este artículo ha sido retirado bajo petición del propietario de los derechos de autor

Contrapunto

Una relación única en el mundo

Recibe lo mejor del periodismo europeo en tu correo electrónico todos los jueves

“Nada sin Alemania” proclama Libération en su editorial del 22 de enero, día del aniversario del Tratado del Elíseo. “Es una realidad que puede que sea dura de aceptar desde nuestro pequeño teatro hexagonal [Francia], pero es tenaz: 50 años después del Tratado del Elíseo, [...]Francia ya no puede o casi no puede hacer nada sin ponerse de acuerdo con su potente socio alemán”.
El diario alaba esta relación única:

Ningún otro país del mundo ha construido con un gran Estado vecino una maraña tan sofisticada de relaciones económicas, comerciales, financieras, políticas e incluso culturales, tan densas como apasionantes.
Al hacer mención del compromiso militar francés en Malí, Libération subraya la resistencia de Alemania “ante la idea de asumir las responsabilidades internacionales que su potencia exige” y manifiesta que:
De la hoja de ruta dejada por Adenauer y de Gaulle, se ha cumplido e incluso superado salvo en un ámbito, el de la política de seguridad. El general [de Gaulle] llegó a afirmar que si las dos orillas del Rin no tenían nada que decirse en materia de defensa, se arriesgaban a que un día no tuviesen nada que intercambiar. Al Tratado del Elíseo no le ha salido ninguna arruga, pero a Alemania aún le queda camino por recorrer.

Tags
¿Te ha gustado este artículo? Nos alegra mucho. Se encuentra disponible para todos nuestros lectores, ya que consideramos que el derecho a la información libre e independiente es esencial para la democracia. No obstante, este derecho no está garantizado para siempre, y la independencia tiene su precio. Necesitamos tu apoyo para seguir publicando nuestras noticias independientes y multilingües para todos los europeos. ¡Descubre nuestras ofertas de suscripción y sus ventajas exclusivas y hazte miembro de nuestra comunidad desde ahora!

¿Eres un medio de comunicación, una empresa o una organización? Consulta nuestros servicios editoriales y de traducción multilingüe.

Apoya el periodismo europeo independiente

La democracia europea necesita prensa independiente. Voxeurop te necesita a ti. ¡Únete a nosotros!

Sobre el mismo tema