Contra la corrupción, transparencia

Al igual que otros países de Europa Central, Eslovaquia está gangrenada por la corrupción. Su gobierno ha decidido poner fin a esta plaga publicando todos los concursos de operaciones públicas.

Publicado en 5 enero 2011 a las 16:20

Antes de Navidad, el Parlamento eslovaco aprobó una enmienda del Código Civil. Desde el 1 de enero de 2011, todo contrato comercial firmado con el Estado deberá publicarse en Internet. Dicha publicación será una condición de su validez.

Este tipo de transparencia es totalmente inusual. Incluso en los países europeos que pueden enorgullecerse de registrar un nivel muy bajo de corrupción, esta obligación no es la norma. De hecho, la corrupción en el entorno político eslovaco es lo que ha instado a la primera ministra Iveta Radičova a adoptar esta iniciativa, cuya realización a través de la aprobación de esta enmienda constituye sin duda su mayor victoria política desde su ascenso al poder en julio de 2010.

Además, cabe destacar que este texto tiene efecto retroactivo. El gobierno eslovaco ya ha publicado todos los contratos firmados con el Estado a lo largo de los últimos cuatro años y se ha comprometido, de aquí a finales de año, a mostrar todos los firmados desde 2000.

Esta manera de instaurar tan radicalmente la transparencia en el Estado se puede explicar por varios motivos. Al contrario que en República Checa, donde el principal tema de la campaña de los partidos de derecha giraba alrededor del endeudamiento del Estado, en los debates eslovacos se trataba sobre todo el tema de la creciente corrupción que imperaba en el gobierno de Robert Fico.

Recibe lo mejor del periodismo europeo en tu correo electrónico todos los jueves

La oposición de entonces hizo todo lo posible para suscitar en la opinión pública una fuerte aversión contra todos los que aceptaban sobornos, recordando las malversaciones de bienes públicos que habían realizado los miembros del gobierno de Vladimír Mečiar en los años 90, un episodio que sigue siendo un recuerdo amargo en la memoria histórica de Eslovaquia.

Los políticos sometidos a la presión de los medios

Iveta Radičová ha hecho de la lucha contra la corrupción su caballo de batalla. Pero también podemos encontrar otra explicación, más general, que responde a una tendencia global: Facebook cada vez influye más en las relaciones sociales y el mundo político está sometido a una presión cada vez más intensa por parte de los medios de comunicación. WikiLeaks tan solo constituiría un efecto secundario del fenómeno. Por lo tanto, los políticos únicamente tendrían dos opciones: o esconderse tras muros defensivos o todo lo contrario y apostar por la transparencia total.

Solo el tiempo nos dirá hasta qué punto la experiencia eslovaca reducirá la corrupción. La oposición afirma que la publicación de miles de contratos tan solo hará que la sociedad y los medios de comunicación se desborden con tantos datos y que no podrán analizarlos. Por su parte, los defensores de esta experiencia pretenden que haya siempre alguien, como una empresa que haya perdido una licitación, por ejemplo, para alertarles sobre los precios excesivos de ciertos negocios. Y sobre todo, el hecho de saber que los contratos se publicarán en Internet obligará a las empresas y a los funcionarios a adoptar un comportamiento responsable.

Laboratorio de experimentos sociales

Este avance de Eslovaquia hacia una transparencia casi absoluta del Estado sin duda es una acción arriesgada y nadie quiere predecir cuáles serán sus efectos negativos. Además, no es nada seguro que esta estrategia logre acabar con los tentáculos de la corrupción, que se encuentra tan hipertrofiada en República Checa como en el resto de Europa Central y que ha sabido desarrollar una aptitud singular para esquivar las leyes, por muy buena intención que tengan.

Por su agitada historia política, durante la cual han accedido regularmente al poder del país una cuadrilla de políticos radicales, Eslovaquia se convierte por segunda vez en un laboratorio de experimentos sociales, tras la introducción hace ocho años de una serie de reformas fiscales radicales.

Tags
¿Te ha gustado este artículo? Nos alegra mucho. Se encuentra disponible para todos nuestros lectores, ya que consideramos que el derecho a la información libre e independiente es esencial para la democracia. No obstante, este derecho no está garantizado para siempre, y la independencia tiene su precio. Necesitamos tu apoyo para seguir publicando nuestras noticias independientes y multilingües para todos los europeos. ¡Descubre nuestras ofertas de suscripción y sus ventajas exclusivas y hazte miembro de nuestra comunidad desde ahora!

¿Eres un medio de comunicación, una empresa o una organización? Consulta nuestros servicios editoriales y de traducción multilingüe.

Apoya el periodismo europeo independiente

La democracia europea necesita prensa independiente. Voxeurop te necesita a ti. ¡Únete a nosotros!

Sobre el mismo tema