El papa Francisco acudió a la isla de Lampedusa, en el sur de Italia, el 8 de julio. El sumo pontífice lanzó un ramo de flores al mar en memoria de los numerosos inmigrantes que mueren ahogados tratando de llegar a Europa. Posteriormente ofició una misa que el diario La Repubblica tilda de "cuasi rito fúnebre por las víctimas de la inmigración".
Según Naciones Unidas, desde principios de año han desembarcado en el sur de Italia procedentes del norte de África unas 8.000 personas, y unas cuarenta han muerto durante la travesía, frente a las 500 de 2012.
Tags