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"Despidos más fáciles para agradar a la UE", titula La Stampa tras la cumbre celebrada ayer en Bruselas sobre la crisis del euro. Las nuevas medidas presentadas por Berlusconi a sus socios de la UE incluyen la venta de bienes públicos pour un valor que alcanza los 5 billones de euros anuales por un período de tres años, atrasar la edad de jubilación hasta los 67 años desde 2026 ( actualmente establecida en 60-61 años para las mujeres y 65 para los hombres), y, sobre todo, la reforma de las leyes laborales. De acuerdo al nuevo plan, los trabajadores que tengan contrato indefinido podrán ser despedidos si la empresa demuestra que atraviesa por dificultades financieras.
Los líderes europeos han dado la bienvenida a estas decisiones, pero también insisten en un "próximo programa con fechas cerradas" y en un "estricto cumplimiento de las obligaciones". Por su parte, la oposición italiana y los sindicatos han reaccionado negativamente al plan de despidos. "Su oposición ya preocupa a la UE", indica Corriere della Sera. El Parlamento italiano y el Senado votarán próximamente sobre el paquete de austeridad de Berlusconi pero su Gobierno puede encontrar serias dificultades, pues el 26 de octubre obtuvo una doble derrota en el Parlamento. "¿Logrará Berlusconi la mayoría necesaria para aprobar el plan? comenta la Stampa. El diario romanoLa Repubblica también se muestra escéptico sobre las propuestas de Berlusconi: "La UE pide medidas concretas pero Berlusconi todavía está haciendo vagas promesas".
