Las numerosas protestas de usuarios y hackers durante los últimos días contra el acuerdo ACTA [Acuerdo Comercial Anti-Falsificación], que obliga a los 39 Estados signatarios a perseguir activamente la piratería en Internet, “no han tenido ningún efecto”, escribe Gazeta Wyborcza. Varsovia firmará este instrumento a finales de semana. Y ante el temor de que el ACTA restrinja la libertad de expresión en línea, los usuarios de Internet y numerosas organizaciones que los apoyan han bloqueado durante varios días las páginas web del Gobierno.
El sábado 21 de enero, el grupo Anonymous llevó a cabo con éxito un ataque cibernético que impidió el acceso a varias páginas de sitios web estatales de primer orden y el lunes 23 de enero un movimiento que se llama a sí mismo “Polish Underground” pirateó la página web del primer ministro y colgó el vídeode una blogger conocida como “Baśka”, en el que aparecía disfrazada de general Jaruzelski y anunciando la imposición de ley marcial.
Quienes protestan contra el acuerdo ACTA acusan al Gobierno de no haberlo consultado con la población y piden un debate abierto sobre las leyes de derechos de autor que ya se ha planteado en la prensa. “Para proteger la propiedad intelectual, ACTA emplea una bomba atómica, y los efectos de su explosión son impredecibles”, advierte Gazeta Wyborcza, que sugiere que el Tribunal de Justicia de la Unión Europea debería revisar dicho tratado.