La Comisión Europea se está planteando introducir [cuotas obligatorias](http:// http://europa.eu/rapid/pressReleasesAction.do?reference=IP/12/213&format=HTML&aged=0&language=ES&guiLanguage=en) de mujeres en los consejos de administración de las empresas después de que el llamamiento a las compañías para que lo hiciesen voluntariamente no hayan tenido ningún efecto, informa Rzeczpospolita. “Únicamente 24 empresas europeas han suscrito la propuesta que Bruselas les remitió hace un año, en la que pedía aumentar el número de mujeres en puestos directivos hasta un 30% en 2015 y hasta un 40% en 2020”, señala el diario de Varsovia. Por este motivo ahora se está barajando imponer cuotas obligatorias.Rzeczpospolita añade que
Incluso si, como en cualquier norma impuesta desde arriba, parece artificial, a nadie se le ha ocurrido todavía una manera más eficiente de aumentar la representación femenina en los peldaños más altos del poder corporativo .
En Polonia, las mujeres únicamente representan un 11% de los consejos de administración y su salario es un 15% menor que el de los hombres en cargos equiparables. En la [UE](http:// http://ec.europa.eu/justice/newsroom/gender-equality/opinion/files/120528/women_on_board_progress_report_en.pdf) en general, las mujeres ganan un 16,4% menos por desempeñar el mismo trabajo que sus compañeros hombres.
En el bastión masculino de Alemania, en el que la cuota femenina se tornó en un tema de conversación la semana pasada porque 350 mujeres periodistas solicitaron que hubiese una mayor representación en puestos directivos de la prensa nacional, el Süddeutsche Zeitung cree que “los caballeros han ignorado durante mucho tiempo la suave presión que las mujeres ejercían para que más féminas fuesen ejecutivas”:
Se puede confiar en que Viviane Reding [la comisaria europea de Justicia que inició el proyecto] tendrá éxito. [...] No haciendo referencia a la discriminación o a la igualdad, sino empleando el argumento del mercado interior: sin cumplir la cuota europea podría darse el caso de que empresas alemanas, por ejemplo, no pudieses participar en una licitación francesa o española, porque no tendrían las suficientes mujeres ocupando puestos de dirección.