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Por primera vez, José Manuel Burao Barroso se ha opuesto públicamente a a Alemania, o más bien a las enmiendas que la canciller alemana Angela Merkel busca aplicar al Tratado de Lisboa, informa Dziennik Gazeta Prawna. Berlín quiere que el tratado incluya penas para los países de la Eurozona que infrinjan repetidamente las normas relativas a los niveles de déficit presupuestario. "Sería inocente creer que el tratado puede ser reformado sólo en las áreas que interesan a Alemania", ha advertido el presidente de la Comisión. Durao Barroso cuenta con el apoyo de la mayoria de los expertos, que consideran que introducir las enmiendas propuestas sería como abrir una caja de Pandora. El diario de Varsovia cree que el quid de la cuestión es que "Berlín quiere curar al euro rápidamente mientras Bruselas prefiere una vía más lenta, más cauta y más europea". En su editorial, Dziennik Gazeta Prawna se pregunta si el presidente de la Comisión, increiblemente silencioso durante la crisis griega, no estará tratando de ganar terreno ahora. Arremeter contra Alemania implica poco riesgo teniendo en cuenta la fría reacción de muchos de los países miembros - incluidos Francia y Gran Bretaña - al plan Merkel, tal y como señala el diario.
