El 22 de abril la Unión Europea flexibilizó las sanciones contra las zonas de Siria controladas por los rebeldes, permitiendo comerciar con petróleo sirio y con industrias afines, escribe European Voice. Las empresas de la UE pueden ahora comprar o vender petróleo, suministrar maquinaria a compañías petroquímicas e invertir en el sector petrolífero, siempre que cuenten con el visto bueno del gobierno rebelde, el Consejo Nacional Sirio, según explica la publicación digital. El régimen del líder sirio Bashar El Asad fue sometido en septiembre de 2011 a un embargo económico para tratar de forzar que negociase con la fuerzas rebeldes. EUobserver añade que:
La retirada parcial de las amplias sanciones de la UE contra el régimen, que se impusieron a instancias de Alemania, es la primera relajación de las sanciones de la UE. Sin embargo, a corto plazo no se espera que se produzca un gran estímulo económico en las zonas controladas por los rebeldes.
Antes de que estallase el conflicto en marzo de 2011, la UE compró casi todo el petróleo que produce Siria, por valor de alrededor de 3.000 millones de dólares (2.300 millones de euros) en 2010.