Gran Bretaña y los Estados Unidos están planeando llevar a cabo lanzamientos de misiles contra objetivos del Gobierno sirio “en pocos días”, como respuesta al presunto ataque químico del régimen contra civiles el 21 de agosto informa The Daily Telegraph.
EL presidente sirio Bashar al Assad ha sucumbido finalmente a la presión internacional, y el domingo 25 de agosto permitió a los inspectores de Naciones Unidas el acceso al lugar del ataque, el distrito de Ghuta en las afueras de Damasco, pero dicha aprobación fue calificada por los Estados Unidos como “demasiado tardía”.
Un editorial en el periódico añade que
En medio del caos de una Siria en desintegración, la intervención armada de Occidente es una opción angustiosa. Pero, igualmente, los riesgos estratégicos de no hacer nada son terriblemente claros.