En el único debate televisado entre la canciller alemana Angela Merkel y su rival, el socialdemócrata Peer Steinbrück, seguido por 17,6 millones de telespectadores, los dos candidatos lidiaron en "un partido abierto que se orientó hacia la ofensiva", sentencia el Tagesspiegel.
Las más grandes diferencias entre ambos contendientes se centraron en "ámbito de política fiscal, laboral y social", explica el diario, para el que no hubo un claro ganador:
El debate, que se desarrolló en gran parte de forma neutra, no reveló nada nuevo. [...] Mientras que Merkel alabó el éxito de su propio Gobierno y afirmó que Alemania está en buena forma económica, Steinbrück ponía el acento en los déficits.
Por otra parte, los dos candidatos anunciaron que no desean una "gran coalición"* entre sus partidos. Según un "sondeo relámpago" realizado durante la emisión por la primera cadena de la televisión alemana, el 49% opinan que Steinbrück fue más convincente, por un 44% para Merkel. Según otro sondeo realizado por el Grupo de Investigación para las Elecciones sobre la misma cuestión, la canciller estaría a la cabeza, con un 40%, por un 33% de su rival.