“Europa es demasiado suave con los carteles de precios”, afirma De Standaard. El diario flamenco se basa en un estudio reciente del laboratorio de ideas Bruegel, sito en Bruselas, según el cual las multas que la Comisión Europea ha impuesto en los últimos 12 años a las empresas que han participado en asociaciones ilícitas sobre los precios no han sido lo suficientemente altas, en la práctica, como para resultar disuasorias.
Según el diario:
En 4 de cada 5 casos, a las empresas les resultaba ventajoso cerrar ese tipo de acuerdos sobre los precios o repartirse el mercado, aún cuando eso implicase que tuviesen que pagar una multa equivalente a varios millones de euros.
De Standaard recuerda que, durante el periodo mencionado, Bruselas ha impuesto multas por valor de 18.400 millones de euros, mientras que las asociaciones ilícitas han supuesto un coste de alrededor de 300.000 millones a los consumidores europeos.