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"Sacrificado". El 20 de julio, el presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, presentó su dimisión, pese a haber sido reelegido con un gran apoyo en las elecciones del mes de mayo. Relacionado en el caso Gürtel (por el nombre en alemán del principal responsable condenado, Francisco Correa), red de corrupción que implica a responsables del PP de Valencia y empresarios que se beneficiaron de favores en la concesión de concursos públicos, Camps decidió irse tras un "tenso pulso" con la dirección de su partido, el Partido Popular (PP, conservador) y su líder Mariano Rajoy, explica La Vanguardia. El diario de Barcelona considera que esta decisión pone fina a un "dilema", entre aceptar reconocer su culpabilidad y pagar una multa para evitar el juicio, o dimitir para defenderse porque él "se considera inocente". Pocos meses antes de unas posibles elecciones anticipadas que podrían tener lugar en otoño, "el Partido Popular ha pagado finalmente su cuota en el nuevo mercado de la ejemplaridad", apunta el periódico.
