Fundado en 1933, anticomunista y después antifascista, la "Semana del mundo" cambió de propietarios en 2001. Bajo la dirección de su redactor jefe Roger Köppel, que se convirtió en accionista mayoritario, el semanario ha virado claramente a la derecha, apoyando abiertamente el UDC, partido populista de Christoph Blocher. La polémica y las investigaciones sobre la corrupción en la política suiza son ahora su marca de fábrica.