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La Comisión Europea “saca con prudencia las garras ante Pekín”, escribe Le Soir al día siguiente de que el órgano ejecutivo comunitario tomase la decisión de imponer provisionalmente derechos antidumping a las importaciones de paneles, células y obleas solares de China. Y ello “a pesar de la oposición de numerosos Estados miembros y de las amenazas de represalias comerciales de Pekín”, señala el diario de Bruselas.
Esta disposición es una “medida de urgencia para dar un balón de oxígeno a un sector que sufre” prácticas de dumping por parte de empresas chinas, según expuso el comisario europeo de Comercio, Karel De Gucht, tal y como recoge el diario.
Sin embargo, él mismo matiza que “la Comisión todavía espera alcanzar una solución amistosa”. De hecho, se ha optado por "un planteamiento progresivo”: a partir del 6 de junio, el derecho se establece en 11,8%, y podría subirse hasta un 47,6%, si no se alcanza ningún acuerdo con Pekín en los próximos dos meses.
Como reacción ante esta medida, China anunció el 5 de junio que realizará una investigación antidumping sobre los vinos importados de la UE.
