A algunos meses de las elecciones legislativas, el Gobierno lituano acaba de decidir la creación de una comisión con objeto de evaluar los daños provocados a Lituania durante su anexión por la Unión Soviética (1944-1991). Vilnius pretende de esta forma pedir reparaciones a Moscú por medio siglo de "ocupación". Una ley adoptada en 2000 ya instó al Gobierno para obtener reparaciones, recuerda el diario Lietuvos Rytas. En los últimos años, la presidenta Dalia Grybauskaite había prometido mejorar las relaciones con Rusia. "Pero la política exterior de Lituania ha sido a la vez pasiva y de confrontación", juzga el editorialista deLietuvos Rytas, para el que :
Es una pena que, en estos últimos años, Rusia se haya negado a reconocer los términos del acuerdo obtenido en la época del presidente Boris Yelsin, y que todavía niegue, incluso con más fuerza, la ocupación de Lituania por los soviéticos [...] sin embargo es difícil disipar el sentimiento de que la puesta en marcha de esta comisión no es sino un simulacro de actividad que pretende enmascarar la inacción del Gobierno conservador y agradar a sus electores, que desean sinceramente la justicia histórica y compensaciones por los males infligidos a Lituania [...] Para mirar frente a frente al doloroso pasado soviético, no queda sino esperar pacientemente un clima político más propicio en Rusia.