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Sí, por fin, VoxEurop es una realidad. Después de muchas idas y vueltas, de muchas dudas, de muchos consejos (buenos y no tanto) avisando del riesgo de la operación, de unas cuantas decepciones y de la más absoluta ignorancia por parte de las instituciones europeas que crearon - y dieron muerte- a Presseurop. Este último proyecto, que nos ha congregado a lo largo de casi cinco años, se convirtió en una referencia, la referencia de información europea. Una apuesta de calidad, un gran esfuerzo humano y editorial, y un proyecto único en su campo, que es Europa, su prensa, sus ciudadanos, sus instituciones. Un foro en Internet que ha acogido por igual y con la misma capacidad y libertad para expresarse a furibundos euroescépticos y a sempiternos partidarios de Europa, que llegó y creció con la gigantesca crisis del euro, de la eurozona, de la misma idea de Europa. Un proyecto que no podía haber llegado en el mejor de los momentos. Pues es ahora cuando nos damos cuenta de la importancia de lo que se decide en Europa, para bien y para mal, y es ahora cuando sí tiene sentido un medio de comunicación que informe y se haga eco de la opinión de sus ciudadanos. Esto hizo con bastante fortuna Presseurop y esto pretende hacer con más ahínco VoxEurop, que ahora incluirá la voz de los medios- escritos fundamentalmente, como fue la tónica en Presseurop, pero también audiovisuales y presentes en el universo digital, como las redes sociales-, y también la de sus ciudadanos, la de sus representantes políticos y sus instituciones.
Contamos con una ventaja y desventaja de partida: nuestra total independencia editorial y financiera. La primera, que también disfrutábamos en Presseurop, nos servirá para analizar la realidad de Europa reflejando lo que esta es hoy por hoy: una amalgama de intereses nacionales y supranacionales, el egoísmo de los Estados-nación luchando por sacar el mejor partido en Europa y la idea federalista rondando- todavía- las mentes y corazones de los europeístas. Una Europa que lucha por salir de la crisis, vilipendiada hasta el extremo por una confusión entre el foro de decisión que representa Bruselas y sus instituciones y el puño de hierro que los Estados-con Alemania al frente- han aplicado en las políticas macroeconómicas para salir del marasmo.
En cuanto a la independencia financiera, se trata de otra forma de decir que nuestros recursos son mínimos. VoxEurop también va a poner a prueba la capacidad de poner en marcha un medio de comunicación- de ámbito europeo, esta es la novedad- sin una inversión financiera de partida que lo apoye desde su comienzo. Contamos con la participación de todos aquellos para los que este proyecto vale la pena, que podrán colaborar en su financiación a través de donaciones o de otros medios que estamos estudiando para asegurar que el proyecto de Voxeurop ha llegado para quedarse y no naufraga bajo la dependencia de una única fuente de financiación. Así que bienvenidos de nuevo a su portal de información europea.
