En la cumbre europea del 22 de mayo, los jefes de Estado y de Gobierno de la UE decidirán sobre el cambio de rumbo de la política energética europea.
Así, indica Der Standard,
Si, en estos últimos años, se puso en acento sobre el desarrollo de energías renovables y la protección del clima, la prioridad es ahora la disminución de los precios de la energía. El objetivo más importante es acelerar el crecimiento y la creación de empleo. Los precios más bajos de la energía serán decisivos para reforzar la competitividad.
El diario añade que la expansión de la energía atómica también será discutida en la cumbre. "Francia y Gran Bretaña presionan para que la energía atómica sea nuevamente digna de ser subvencionada".