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Varios miles de miembros del Partido Laborista (PvdA), pero también alcaldes y los Jóvenes Socialistas (JS) se oponen al proyecto del Gobierno para perseguir penalmente a los sin papeles.
Los contestatarios han lanzado una petición. Y en el congreso del partido socialista, pedirán a su líder, Diederik Samsom, que "rompa con el proyecto, cambie de rumbo y restablezca el principio fundamental del partido, que es el 'derecho a una vida decente'".
Esta medida es parte del acuerdo de gobierno concluido en el pasado otoño entre el PvdA y el Partido Liberal (VVD) del primer ministro Mark Rutte, explica el diario. La contrapartida era que los demandantes de asilo menores no serían devueltos a su país.
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