Bastó con quince horas de “arduas” negociaciones para ultimar el acuerdo sobre el presupuesto de la Unión Europea para el próximo año. El 19 de noviembre se tomó la decisión de que se aumentaría únicamente en un 2%, hasta alcanzar los 129.000 millones de euros. Tal y como apunta el Dziennik Gazeta Prawna, esto significa que es el primer “recorte real en el gasto de la UE”, mientras la tasa de inflación en la eurozona alcanzó el 3% en septiembre. La Comisión y el Parlamento, que reclamaban un incremento mayor del presupuesto (abogaban por una subida del 5%), tuvieron que someterse a la presión de los contribuyentes netos.
“Los países ricos se han salido con la suya”, señala el diario de Varsovia, enumerando a todos: Reino Unido, Países Bajos, Suecia, Austria, Dinamarca y Finlandia. Estos Estados miembros habían luchado durante mucho tiempo para congelar el presupuesto de la UE en términos reales, argumentando que la Comisión no estaba en disposición de aumentar el gasto mientras el resto seguía realizando recortes. “El resultado de las negociaciones sobre el presupuesto de 2012 puede servir de precedente para el proceso de negociaciones más importante acerca del marco financiero plurianual 2014-2020”, concluye el diario de Varsovia, recalcando que el Reino Unido, apoyado por Francia y Alemania, ya había dejado claro que no estaba de acuerdo con ningún aumento del gasto por encima de la inflación. El nuevo marco financiero plurianual de la UE tiene que aprobarse antes de finales del próximo año.