Sobre el muro : Banco Grüezi, Zurich. Cuentas privadas
Uli Hoeneß :
No lo hice por mí. He ahorrado para que el FC Bayern pueda tener un día a Messi".
Uli Hoeneß, el presidente del Bayern de Munich, ha renocido al fisco almán que posee una cuenta en Suiza, con unos fondos estimados en 10 millones de euros.
Revelado a principios de semana, el asunto ha tomado cariz político. Porque en 2012, el Gobierno alemán intentó negociar un acuerdo con Suiza que habría garantizado el anonimato de los evasores fiscales, a condición de que les bancos suizos pagaran al fisco alemán. Pero el Bundestag (Cámara Baja) rechazó dicho acuerdo, y varias regiones compraron los CD-rom que contenían los nombres de los evasores.
Para evitar ser "desenmascarado", Hoeneß se ha denunciado a sí mismo. Pero esta personalidad popular en Alemania se ha convertido en símbolo del laxismo que se reprocha al Gobierno de Angela Merkel en la lucha contra el fraude fiscal. Eso, en la semana en la que el club ha dado la sorpresa, batiendo al FC Barcelona de Lionel Messi por 4.0 en la Liga de Campeones...