Entropa ya no sorprende. La obra del artista checo David Černý, que ilustraba a la Unión Europea utilizando clichés sobre sus países miembros, ha sido desmantelada de la sede del Consejo europeo para ser expuesta en Praga. Después de haber sufrido las coléricas críticas de los eslovacos, empaquetados como un salami húngaro, o de los búlgaros, representados como unos baños a la turca, los checos han acogido la iniciativa con humor.
"Entropa no fue creada por David Černý. Soy yo quién lo hizo, con Jiří Paroubek(el jefe de los socialdemócratas checos), para dañar la imagen del país", ha declarado Václav Havel en la inauguración de la exposición, haciendo referencia a la caída del gobierno liberal en plena presidencia checa de la Unión. Citado por Mladá Fronte DNES, el ex presidente y dramaturgo explicó que la mitificación (Černý había hecho creer que la obra era una creación común de 27 artistas europeos) y la provocación son parte esencial de "la obra de arte moderna, posmoderna y post-posmoderna".