La condena de cuatro años de prisión impuesta al exministro del Interior y antiguo eurodiputado austríaco Ernst Strasser por corrupción debería “proclamarse a lo largo y ancho de la Unión Europea” para conseguir que tenga un efecto disuasorio frente a los manejos ilícitos, defiende con vehemencia European Voice. Periodistas del Sunday Times se hicieron pasar por miembros de grupos de presión y ofrecieron dinero al político a cambio de que modificase la legislación a favor de sus intereses. “La sentencia de Ernst Strasser subraya que la UE necesita su propio fiscal”, prosigue el semanario, mientras alaba la labor de las autoridades austríacas que se han ocupado “con agilidad y energía” del caso. La publicación añade que:
Es complicado pensar en otra autoridad nacional que haya aplicado mano dura contra el comportamiento corrupto en los pasillos de la UE. A pesar de la condena de Strasser, que desgraciadamente es una excepción en lugar de la regla, la UE todavía necesita disponer de su propia fiscalía pública, que disponga de autoridad para abrir diligencias en cualquier parte de la UE y que defienda los intereses financieros de la UE. El Tratado de Lisboa recogía la opción de que la UE establezca una fiscalía europea. Y ya es hora de que se haga realidad.