El fiscal del Estado, Ivo Istvan, pidió el 8 de julio que el Parlamento levante la inmunidad de primer ministro saliente Petr Necas. Se trata de la primera vez en la historia moderna del país que el primer ministro hace frente a una investigación de tipo penal, señala Mladá Fronta Dnes.
Necas supuestamente sobornó a tres diputados de su propio partido, dándoles "cómodos trabajos" en compañías estatales a cambio de seguir apoyando a su Gobierno.
“Juego con dinamita bajo el trasero de la democracia” comenta MF Dnes, añadiendo que
mientras que los comunistas consideraron la ley una extensión de la lucha social […] hoy se trata de una lucha política. Las batallas políticas se mueven hacia el reino de la ley penal.[...]La justicia checa espera un duelo entre ley y demagogia. Su resultado tendrá mayor impacto en el país que un Gobierno compuesto de personas que obtuvieron sus puestos como recompensa por su ayuda [al presidente Milos Zeman].