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Un nuevo azote, esta vez la fiebre Q o Fiebre de Query, se prepara para hacer estragos en las granjas holandesas : todas las cabras y ovejas gestantes serán sacrificadas en las próximas semanas, padezcan o no la enfermedad, anunciaNRC Handelsblad. La enfermedad está presente el país desde 2007 y provoca abortos en los animales infectados, además de ser muy contagiosa -sobre todo durante el parto- tanto para los animales como para los seres humanos que trabajan en las granjas. En 2009, seis personas fallecieron a causa de esta enfermedad, explica el periódico. La medida anunciada "hará revivir el trauma de los 10 millones de cerdos sacrificados entre 1997 y 1998, durante la epidemia de fiebre aftosa", vaticina NRC. Para este periódico, si el gobierno hubiera adoptado las medidas adecuadas para la detección temprana de la enfermedad y de lucha contra la propagación de la misma desde 2007, se habría podido evitar una "masacre".
