"Robert Bourgi, el antiguo 'Señor Africa' que prende fuego a la República", titula Le Monde. El pasado fin de semana, este ex consejero oficial de Nicolas Sarkozy acusaba al antiguo presidente Jacques Chirac y a su antiguo primer ministro Dominique de Villepin de haber “recibido cada año maletas llenas de varias decenas de millones”, por parte de los jefes de Estado africanos, para financiar las campañas electorales.
Estas declaraciones huelen “a podrido”, lamenta el diario, que recuerda que "Bourgi no es un desconocido. Durante mucho tiempo ha sido el colaborador de Jacques Foccart, padre de la unidad de África del Elíseo, creador de las relaciones incestuosas entre Francia y sus antiguas colonias: financiación secreta de tal o cual partido, a cambio del apoyo de Francia a los regímenes establecidos en África”. En un editorial titulado ¿la Vª República, una República bananera?” Le Monde constata que “después del mal sabor de boca que dejó el caso Bettencourt y la vigilancia ilegal de un periodista de Le Monde, este hecho confiere a nuestra democracia una imagen degradada, sucia, y poco adecuada para llevar a cabo un debate electoral que esté a la altura de los desafíos a los que nos enfrentamos actualmente”.