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En Bulgaria, la carta abierta del ministro holandés de Asuntos sociales y de Empleo, Lodewijk Asscher, y del director del think tank británico, Demos David Goodhart, poniendo en guardia a la Unión Europea contra las “consecuencias negativas” de la llegada de trabajadores de Europa Central y Oriental ha sido acogida con estupor.
“Mi homólogo se equivoca” replicó el ministro búlgaro de Empleo, Hassan Ademov, explica Pressa, según el cual la propuesta de Asscher “recuerda a las de su compatriota de extrema derecha Geert Wilders”.
El ministro también señaló que Bulgaria y Países Bajos “firmaron un acuerdo bilateral […], que incluye mecanismos de control del mercado de trabajo en ambos países. Esto excluye el pluriempleo”, uno de los temores expresados por Asscher y Goodhart.
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