El 12 de enero, el Parlamento serbio adoptó por 175 votos a favor y 19 en contra una resolución del Gobierno que fija las bases de las próximas negociaciones con Pristina. El texto afirma que Belgrado aceptaría una amplia autonomía para las comunidades serbias del norte de Kosovo, a condición de que la comunidad internacional renuncie a exigirle un reconocimiento formal de la exprovincia serbia. Ello significaría de facto la renuncia de Serbia a la división de Kosovo o su reintegración en Serbia, indica Blic.
Tags