Los funcionarios de la Comisión Europea, que preparan actualmente un informe sobre cómo estabilizar la frágil economía del país y recapitalizar sus bancos, tienen demasiado acceso a datos económicos confidenciales del Gobierno pero bajo una supervisión insuficienteinforma Dnevnik.
La Comisión presentará a mediados de noviembre su informe final sobre cómo salvar al sector financiero, del que algunos analistas estiman que necesitará 5.000 millones de euros en capital.
En todo caso, el diario lamenta que, a pesar del acceso a datos confidenciales, los funcionarios de la UE no están obligados a informar sobre sus contactos con lobistas, que podrían buscar ejercer influencia sobre las decisiones de la UE. EL periódico añade que
algunos de las funcionarios de la UE podrían tener conversaciones privadas con actuales o potenciales compradores de deuda pública eslovena. La falta de transparencia no solamente aumenta el coste del crédito, también aumenta el riesgo de corrupción.