A principios de 2008, el gobierno portugués creó un archivo nacional para almacenar los perfiles de ADN de los autores de robos, homicidios y delitos sexuales condenados a más de tres años de prisión. Pero actualmente, el archivo tan sólo cuenta con un perfil, constata Diário de Notícias. El Instituto Nacional de Medicina Legal (INML), encargado de gestionar esta base de datos, únicamente ha recibido 18 solicitudes de registro de perfiles, mientras que el gobierno, que se basaba en la media anual de condenas, había anunciado que se integrarían 6.000 archivos desde el inicio de este año hasta su final.
Estos resultados son "insuficientes", tal y como lamenta el jefe del laboratorio científico de la policía judicial, que pide "que el procedimiento de registro se simplifique", puesto que la ley que ha creado este archivo "es una de las más restrictivas de Europa". Por ahora, el registro de un perfil depende de la autorización explícita del juez cuando dicta su sentencia. El Sindicato de jueces, al igual que la Policía, solicita que el registro sea automático. Pero el gobierno y elINML se oponen a ello, ya que temen por la "seguridad de los archivos" y por la "confianza de la opinión pública".