Tres ecologistas, cuatro euroescépticos y tres pro-europeos: han sido numerosos los partidos pequeños checos que han presentado listas en las elecciones europeas. Y muchos los que han fracasado. Muchos jefes de tribu para tan pocos indios, explicaRespekt, tomando el ejemplo de los Verdes, cuyo jefe Martin Busik ha presentado la dimisión después de su catastrófico resultado (solamente un 2%), o el del presidente Václav Klaus, que ha apoyado a los partidos euroescépticos.
Según el semanario, estos pequeños partidos podrían haber tenido éxito si sus dirigentes hubieran unido sus fuerzas. "Pero en la República Checa", afirma, "cada uno se cree un 'jefe de tribu' irreemplazable y pocos están dispuestos a adaptar su papel al de 'indio común y corriente', y esto es un problema sin solución".