Este 1 de octubre comienza el primer censo de la población de Bosnia-Herzegovina desde 1991. La operación podría levantar tensiones nacionalistas, en el origen de la guerra de 1992-1995, puesto que los ciudadanos tendrán la posibilidad de declarar su nacionalidad (que depende de la entidad administrativa a la que pertenezcan) o su etnia (bosnios, croatas, serbios u "otros", es decir, de origen multiétnico o gitanos, fundamentalmente), así como su religión o su lengua, indica Oslobođenje. Los que se nieguen a identificarse podrán declararse "bosnios" o "bosnios-herzegovinos".
Los primeros resultados serán publicados 90 días después del cierre de la iniciativa, el 15 de octubre.
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