"El nuevo conejo"
El 11 de junio, las negociaciones entre Grecia y sus acreedores internacionales (FMI, UE y BCE) fueron interrumpidas después de que el Fondo Monetario Internacional retirara su delegación, aludiendo a "diferencias significativas" con la parte griega sobre la reforma de la fiscalidad y las pensiones, y ello después de una nueva serie de reuniones entre el primer ministro griego Alexis Tsipras y la canciller alemana Angela Merkel, el presidente francés, Francois Hollande, y el de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, para tratar de desbloquear las negociaciones.
Grecia y sus acreedores han entablado conversaciones que pueden suponer una última oportunidad para discutir las reformas requeridas a Atenas a cambio de la liberación de un tramo de 7.200 millones antes del 30 de junio, a falta de lo cual Grecia se verá obligada a declararse en bancarrota. Tsipras insiste en una solución política, mientras que el "grupo de Bruselas" exige compromisos específicos por parte de Atenas.