Tras su dimisión anunciada el 20 de febrero, después de numerosos días de manifestaciones, el primer ministro Boiko Borisov está “exento de toda responsabilidad”, a juicio del diario. El día 21, ya se dio un baño de masas en las gradas del Parlamento, en el que los diputados acababan de ratificar la dimisión de su Gobierno.
“Su dimisión se transforma en argumento de campaña”, opina el diario, en referencia a la cita electoral legislativa prevista para el próximo julio, aunque la fecha probablemente se adelante a primavera.
Y mientras el presidente de la República, Rosen Plevneliev, anunció que había “entablado negociaciones” para formar un Gobierno técnico que se ocupe de los asuntos de gestión hasta entonces, parece que ya ha empezado la campaña electoral.
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