El 28 de febrero a las 20 horas el papa Benedicto XVI dejará su cargo para convertirse en "papa emérito", un título inédito. Se retirará a la residencia de Castel Gandolfo, cerca de Roma, donde residirá dos meses antes de ingresar en un monasterio del Vaticano.
A su 85 años, Joseph Ratzinger anunció el pasado 11 de febrero que se encontraba demasiado fatigado para continuar asumiendo su cargo, en una Iglesia que debe hacer frente a una creciente contestación interna y a dilemas éticos y a escándalos de índole diversa dentro de su propio seno.
La Santa Sede seguirá vacante hasta que los cardenales electores, reunidos en cónclave en la Capilla Sixtina desde ahora hasta mediados de marzo, escojan a su sucesor.

Has podido acceder a todo el artículo.

¿Quieres apoyar nuestro trabajo? Voxeurop depende de las suscripciones y donaciones de sus lectores/as.

Descubre nuestras ofertas y ventajas solo para suscriptores/as a partir de 6 € al mes.
Suscribirse

O haz una donación para fortalecer nuestra independencia.
Hacer una donación

¿Eres un medio de comunicación, una empresa o una organización? Consulta nuestros servicios editoriales y de traducción multilingüe.

Apoya un periodismo que no conoce fronteras

Aprovecha nuestras ofertas de suscripción o haz una donación para fortalecer nuestra independencia

Sobre el mismo tema