España cerró 2012 con el mayor "desfase" en los objetivos de reducción del déficit público en Europa, puesto que alcanzó el 10,6% del PIB, con la inclusión de la ayuda europea a los bancos españoles. Según fuentes europeas y gubernamentales, España podría obtener dos años más, hasta 2016, para reducir el déficit público hasta el 3% del PIB.
El País afirma en su editorial que esos dos años "favorecerían el crecimiento y aliviarían las tensiones autonómicas", pero avisa de que los nuevos objetivos de déficit deberían "cumplirse escrupulosamente".
Por otra parte, el ministro de Economía, Luis de Guindos, ha declarado que el PIB se reducirá en 2013 entre dos y tres veces más de lo esperado inicialmente, con un crecimiento negativo del -1,5% en lugar del -0,5%.