El presidente checo Milos Zeman ha provocado una ola de críticas en el medio universitario, político y periodístico, al negarse a elevar al rango de profesor de historia de literatura Martin C. Putna, como pedía la Universidad de Praga.
El jefe del Estado ha declarado que dudaba en promocionar al popular autor del libre "Homosexualidad y catolicismo", por sus opiniones liberlaes y su participación en la "gay parade".
"El papel del presidente en la nominación de los profesores es puramente ceremonial. La ceremonia de firma de los decretos (...) es una herencia de la monarquía austro-húngara", recuerda Lidové noviny, que estima que el presidente ha ido más allá de sus propias competencias.
Live | IA, medios de comunicación y democracia: ¿una ecuación imposible?
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