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Los ministros de Finanzas de la eurozona quieren que los ahorradores de Chipre contribuyan a través de una quita a todos los depósitos bancarios privados al rescate de 10.000 millones de euros previsto para la isla, pero el Gobierno nacional trata de suavizar la tasa que se aplicará sobre los pequeños ahorradores.
Tras un informe presentado el domingo 17, el Parlamento chipriota votará el paquete de medidas el lunes, que es día de fiesta en la isla. Por tanto, el lunes los bancos no abren y puede que el Gobierno decida mantenerlos cerrados hasta el miércoles para evitar más inquietud y revuelo y que los clientes acudan a los bancos en masa para retirar todos sus ahorros.
En una alocución dirigida a los ciudadanos de la isla el domingo, el presidente Nicos Anastasiades explicó que las alternativas eran "un escenario catastrófico de bancarrota desordenada o el escenario de un doloroso pero controlado manejo de la crisis".
