"Una ayuda a las parejas que no puedan tener hijos o una nueva forma de prostitución?". Con esta pregunta titula su portada Informationpara constatar la intensificación en Dinamarca del debate sobre el comercio de óvulos. Según explica el diario, los daneses necesitan cada vez más óvulos, ya que las mujeres intentan tener hijos cada vez más tarde. Desde comienzos de año, el Rigshospitalet, el principal hospital del país, ha realizado 40 inseminaciones a mujeres que no podían tener hijos. Anders Nyboe Andersen, director del centro de Fertilidad en el Rigshospitalet, propone pagar 1.000 euros a las donantes. Según Bente Holm Nielsen, médico y miembro de la asociación Dansk Kvindesamfund (sociedad danesa de las mujeres), califica la propuesta de grotesca. En su opinión "El óvulo se convierte así en una mercancía y las mujeres se encuentran en una situación de prostitución de la reproducción". De momento en Dinamarca está prohibido pagar para obtener óvulos, pero si una mujer que se somete a un tratamiento hormonal produce más óvulos de los necesarios, debe donarlos a otras mujeres.
Live | IA, medios de comunicación y democracia: ¿una ecuación imposible?
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