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“Los subsidios de urgencia: a partir de enero, habrá que merecerlos”, anuncia Pravda. El 26 de noviembre, el Parlamento
rechazó el vento del presidente Ivan Gasparovic sobre la legislación que introducía una obligación de trabajo para los beneficiarios del subsidio reservado a los más pobres.
A partir del 1 de enero de 2014, cada beneficiario tendrá que comprometerse a efectuar 32 horas de “trabajo público” por mes para recibir un subsidio mensual de 61,60 euros. El presidente se han negado a firmar la ley votada a finales de octubre en razón de una posible inconstitucionalidad, puesto que se inspira en una ley adoptada en la República Checa y después censurada en 2012 por el Tribunal Constitucional, que la había calificado de “trabajo forzado”.
El diario indica en todo caso que la ley sobre el subsidio de urgencia, reservado a los más desfavorecidos, está apoyada por varios diputados de la oposición de derecha y aprobada por un representante de la comunidad gitana.
